El profesiograma y su importancia para el reconocimiento de la incapacidad permanente total para la profesión habitual

En el reconocimiento de una pensión de incapacidad permanente total, tiene especial entidad la llamada guía de valoración profesional o profesiograma que el Instituto Nacional de la Seguridad Social toma como referencia para valorar si un trabajador puede ser apto para ser beneficiario de una pensión por incapacidad permanente total por razón de la relación existente entre su trabajo y sus patologías.

El presente artículo tiene la finalidad de explicar al lector que es y en que consiste el profesiograma y su aplicación en el reconocimiento de una incapacidad permanente.

¿Qué es y en que consiste la guía de valoración profesional o profesiograma?

Es el documento que sirve de ayuda y apoyo a los inspectores médicos de la Seguridad Social, al Equipo de Valoración de Incapacidades o Tribunal Médico y a los abogados especialista en incapacidades permanentes para conocer las funciones y tareas asignadas a cada ocupación, las aptitudes y facultades psicofísicas que debe poseer un trabajador para desarrollar una actividad determinada, los posibles riesgos derivados de la actividad profesional y las circunstancias específicas del ambiente de trabajo que puedan incidir en la capacidad laboral de los trabajadores.

La guía de valoración profesional tiene su aplicación, con carácter general, para el reconocimiento de la incapacidad permanente para la profesión habitual del interesado. A saber, la ley general de la Seguridad Social define la incapacidad permanente total como “la que inhabilite al trabajador para la realización de todas o de las fundamentales tareas de dicha profesión, siempre que pueda dedicarse a otra distinta.”

¿Cómo se aplica el profesiograma para el reconocimiento de la incapacidad permanente?

Para explicar y entender esta cuestión vamos a partir de un ejemplo práctico:

Trabajador: instructor de autoescuela

Lesiones o patologías: espondilolistesis reducida tras artrodesis, dorsalgia, lumbalgia postartrodesis y pseudoartrosis lumbar, secuelas por fractura de la articulación del codo izquierdo.

Según el profesiograma, seria de aplicación el siguiente cuadro donde se indican los grados de requerimientos para la profesión de instructor de autoescuela. Los grados se clasifican de la siguiente manera: 1 – leve, 2- moderado, 3 – elevado y 4 – muy elevado.

En el siguiente enlace podrás acceder a la guía de valoración profesional.

Por tanto, a la vista del anterior cuadro y patologías del trabajador, se observa que están afectados los requerimientos de la columna dorsolumbar, codo y sedestación, considerados moderado y elevados. Existiendo, por tanto, una imposibilidad para el cumplimiento de los requerimientos exigidos por el profesiograma como consecuencia de las lesiones del trabajador

Con esta situación, el interesado podría ser apto para el reconocimiento de la incapacidad permanente para el ejercicio de su profesión habitual de instructor de autoescuela.

En el siguiente enlace podrás acceder a la guía de valoración profesional.

Para ello, es recomendable estar adecuadamente asesorados y asistidos por profesionales en la materia. En ESM reclamación sociosanitaria contamos con un equipo de abogados especialista en el reconocimiento de la pensión de incapacidad permanente que te ayudarán en la tramitación de todo el procedimiento para conseguirla.

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