El miedo a los rebrotes agrava la situación en las residencias de ancianos por toda España

Las residencias de ancianos se blindan ante el incremento en el número de contagios en España. Desde el régimen de visitas, pasando por los protocolos de acceso y desinfección, las residencias de ancianos se preparan para “el segundo asalto” de la COVID-19.

El Ministerio de Sanidad cifra en 200 los rebrotes activos en España, un mes más tarde de la finalización del estado de alarma. Ante el número creciente de rebrotes, ya sin limitaciones a la movilidad por todo el territorio nacional, y en medio de las sucesivas oleadas de españoles que se desplazan a sus segundas residencias y a las localidades costeras, las residencias de ancianos se preparan para afrontar el “segundo asalto” de la COVID-19.

Durante el primer brote la COVID-19 se ensañó con la población más frágil y vulnerable: nuestros ancianos. De acuerdo con los datos de las Comunidades Autónomas, en algunos territorios, la proporción de ancianos fallecidos con motivo de la COVID-19, en relación con el número total de víctimas, superan el 80% (incluso el 90% en el caso de Castilla y León, región que encabeza el ranking).

Las competencias sobre las residencias de ancianos nunca estuvieron transferidas al Estado (ni tan siquiera fueron asumidas por el mando único), sino que se mantuvieron en manos de las Comunidades Autónomas siendo éstas las responsables de la gestión y control de la situación epidemiológica en estos centros. Ahora, son también las Comunidades Autónomas las que deben adoptar medidas frente a la segunda ola de COVID-19 que ya se divisa.

Entre las medidas que se han adoptado ya por las Comunidades Autónomas se encuentra el restringir el acceso a los centros sociosanitarios, redefinir los sistemas de entrada/salida, reducir el número de visitas y reforzar los controles sobre los residentes y también sobre sus visitas. Las Comunidades Autónomas tratan de no repetir el trágico error cometido durante la primera oleada: abandonar a los ancianos en sus residencias ante el colapso del sistema sanitario.

De la limitada experiencia que tenemos de la COVID-19 podemos extraer valiosas enseñanzas; de hecho, el blindaje y aislamiento (sobre seguro) de los centros sociosanitarios puede ser una de las formas de afrontar la nueva ola de rebrotes. Sólo si se tiene en cuenta la especial vulnerabilidad de nuestros mayores, podrán ponerse las medidas necesarias para protegerles. En este sentido, la prevención es la clave: la gestión de los medios disponibles para anticiparse al golpe de la pandemia.

Así, desde el equipo de ESM Reclamación Sociosanitaria somos conscientes de la difícil situación a la que se enfrentan los establecimientos sociosanitarios, pero, sobre todo, de la dificilísima situación en que se encuentran nuestros mayores: aislados o en situación de quasi soledad, desde mediados de marzo de 2020, la desconexión con el tejido familiar y social, la psicosis ante un posible contagio y la idea generalizada de que contagiarse de la COVID-19 equivale a la pena capital... A esta situación de desamparo se añade el temor de que se repitan las escenas de ancianos abandonados en los centros sociosanitarios, el de los trabajadores sobrepasados por la falta de medios (humanos y materiales) y el de las informaciones confusas (sino el apagón informativo) sobre las situaciones vividas en estos centros.

Para evitar una nueva tragedia en los centros sociosanitarios, es preciso (i) disponer de test rápidos y pruebas PCR, (ii) equipos de protección individual, geles, mascarillas y guantes, (iii) extremar los controles sobre los residentes y, sobre todo, sobre el personal que presta sus servicios en los centros, así como también sobre los visitantes, (iv) desarrollar sistemas de comunicación e integración comunitaria de los residentes, (v) habilitar protocolos de aislamiento efectivos de la población residente que presente síntomas y (vi) tener claros los protocolos de derivación a centros hospitalarios ante la aparición de síntomas de COVID-19 (bien tener la capacidad de medicalizar (de manera efectiva) estos centros).

Todos queremos que nuestros mayores se encuentren en las mejores manos y, desde ESM Reclamación Sociosanitaria queremos ayudarte a ello. Contacta con nosotros, te ayudaremos y asesoraremos.